Se dice actor de televisión pero su verdadero oficio es el de estafador y ladrón especializado en prestamos que nunca paga y tras realizar el atraco jamás se vuelve a comunicar con sus víctimas
Por Ignacio Morales
Primero de tres
Ciudad de México.- El Ministerio Público investiga un caso de robo que lo consideran algo extraño o fuera de lo común, pues se trata de un moderno ladrón que se dedica a chantajear, extorsionar a sus víctimas y se trata de un Luis Eduardo Monroy Caballero, que de caballero no tiene nada, pues se trata de un vulgar ratero que presume ser actor de televisión.
Para los elementos de Departamento de la Policía Investigadora (DPI) que investigan el caso se han percatado que con el dinero de las víctimas ha construido un gran emporio a lo que le han dado en llamar el concepto Fungi, que consta de hostales, cabañas, y bares tanto en la Ciudad de México como en Tepoztlán, Morelos.
Luis Eduardo junto a su esposa Susana Viramontes en un lujoso yate en uno de sus múltiples viajes a las playas mexicanas y extranjeras.
Con lo robado Luis Eduardo Monroy Caballero ha adquirido junto con su esposa Susana Viramontes Serna decenas de propiedades y se ha dado el lujo de rentar departamentos en sectores exclusivos para empresarios en esta ciudad.
El desfalco de Monroy Caballero asciende a varios millones de pesos y llama poderosamente la atención de los elementos de la DPI, pues el ladrón cambia constantemente de domicilio, pues mantiene rentados varios departamentos al mismo tiempo, los habita cuando ve que la justicia esta a punto de echarle el guante o bien lo subarrenda para tener acceso al inmueble.
El escurridizo hampón por ejemplo da como su último domicilio la calle Veracruz 55 bis de la colonia Condesa, incluso cita a sus víctimas en ese domicilio y les hace creer que ahí vive, pero resulta que ese edificio está abandonado y las personas estafadas no tienen forma de localizarlo y cobrarle el dinero que les adeuda.
En estos edificios abandonados Luis Eduardo Monroy ubicados en la calle Veracruz numero 55 Bis es donde dice vivir pero la policía innumerables veces se ha presentado en el lugar y nunca lo ha podido localizar.
El ladronzuelo usa como pretexto una presunta enfermedad de la columna de un hermano suyo que es doctor y como requiere dinero para una operación les hace la llorona de que si no consigue 200 mil pesos su familiar está condenado a morir.
Cuentan las víctimas que Monroy Caballero es buen actor, pues cuando pide dinero para la presunta operación de su hermano hasta llora, pero la realidad es que su familiar goza de excelente salud, pues ejerce la profesión de médico en el municipio de Torreón, Coahuila.
Son decenas las personas estafadas por este astuto ladrón que llama la atención de la Policía por su peculiar forma de robar, y los montos van desde los desde los 200 mil pesos e incluso hasta medio millón de pesos, pero ya concretado el préstamo el hamponcete se hace ojo de hormiga y en ese momento cambia de número telefónico y jamás se vuelve a saber de él.
Luis Monroy Caballero ya es imputado por el delito de robo en una de las múltiples carpetas que tiene abiertas en las agencias del Ministerio Público de la Ciudad de México.
Regularmente Monroy Caballero, cuando piensa estafar a una de las víctimas le pide prestado el carro a su esposa Susana Viramontes Serna quien es una presunta emprendedora un vehículo Beatle de color gris de reciente modelo con placas de circulación NZH-67-86 del Estado de México.
Luis Monroy Caballero ya es buscado por el delito de robo, ya que ha estafado a un gran número de personas. Se dice que es un hábil ladrón que engaña a la gente, pues sabe algo de actuación.
También fue visto en el complejo de edificios ubicado en Pico de Verapaz y Paseo del Pedregal en el fraccionamiento Jardines de la Montaña, un exclusivo y moderno lugar donde solo pueden entrar mediante un código que se les otorga a los inquilinos y cuyas rentas superan los 50 mil pesos mensuales.
Asimismo se refugiaba en otro edificio Penta torre ubicado en avenida Periférico 4225 en el fraccionamiento Jardines de la Montaña, un complejo de edificios de departamentos y de oficinas donde difícilmente puede ser localizado el susodicho.
Raul Espinosa